El Teatro Góngora acoge mañana sábado Cuatro corazones con freno y marcha atrás, considerada una de las más populares y divertidas comedias de Enrique Jardiel Poncela, autor considerado por su ingenio y agudeza como el Oscar Wilde español. Bajo la dirección de Gabriel Olivares, un amplio y joven pero experimentado reparto encarna a los más de quince personajes que aparecen en la obra, en la que el humor inteligente y burbujeante del escritor madrileño se centra en mostrar los contratiempos e inconvenientes que puede ocasionar la inmortalidad. Se trata de un texto  casi  filosófico, porque habla de lo que verdaderamente es importante: el amor, la verdad, la belleza… y también del paso del tiempo, la pérdida de las ilusiones y la muerte, Pero además, y sobre todo, de la vida, que para Jardiel consiste en una aventura caótica sin pies ni cabeza de la que hay que reírse siempre, puesto que la risa es una cosa muy seria.

 

Estrenada en mayo de 1936 con el título Morirse es un error -el nombre original, recuperado después de la Guerra Civil, le pareció muy largo al empresario del teatro donde se interpretó por vez primera-, Cuatro corazones sin freno y marcha atrás ha sido llevada a escena desde entonces en casi una decena de montajes, en los que han participado grandes actores y actrices como José Sazatornil, Isabel Garcés, Antonio Ferrandis, Maria Luisa Ponte, María Fernanda D´Ocón, Alfonso del Real, Adriana Ozones. También pudo verse en un Estudio 1, el recordado programa de TVE dedicado a célebres obras del teatro universal.

 

La obra cuenta la historia de cinco personas que se convierten en inmortales para poder conseguir sus propósitos. Tras ingerir el elixir de la eterna juventud, los protagonistas creen haber encontrado la solución a todos sus problemas y hallado la felicidad absoluta, cuando, muy al contrario, lo que parece ser una existencia maravillosa se convertirá en una realidad no apetecida. Un cartero, dos parejas de enamorados, una suculenta herencia, una pócima milagrosa y una isla desierta son los ingredientes de una historia que, en opinión de algunos críticos, está entre las comedias más logradas de Jardiel. Los equívocos y las situaciones hilarantes se suceden a la  vez que los cinco inmortales van descubriendo que la vida eterna es un aburrimiento.

 

En opinión de Olivares, el autor mezcla muy bien lo popular con lo elitista, y todo ello bañado por lo absurdo. “Conecto de una manera muy natural con él -explica  el director-. Me gustan muchísimo las situaciones, los personajes y sobre todo, el uso del lenguaje, que no sé si se entendía muy bien en su época”. El dramaturgo, añade, “mezcla como nadie el humor y la poesía. Eso es Jardiel, esa unión. Y además, es un autor muy moderno: esta función es prácticamente ciencia ficción”. Para Olivares, ofrecer este montaje al público es reconciliarlo “con un tipo de teatro que siempre se ha hecho de manera convencional, y yo estoy intentando hacerlo de otro modo, darle una vuelta”.

 

El reparto de Cuatro corazones con freno y marcha atrás lo componen Andrés Acevedo, Eduard Alejandre, Ariana Bruguera, David García Palencia, Asier Iturriaga, Carmen Flores -reciente ganadora del Premio a la Mejor Actriz de Reparto en el Festival de Cine de Málaga-, Javier Martín, Patrick Martino, Alejandro Pantany y Guillermo Sanjuán.

¡No te pierdas nada!

Suscríbete a nuestro boletín para estar al día de la actualidad y de los últimos espectáculos.

Entradas Recientes